
Por ManHerrera Delgans
Desde enero de 2025, la NBA ha sido escenario de eventos y actuaciones que han capturado la atención de aficionados y expertos. Uno de los momentos más destacados ocurrió en el NBA Paris Games 2025, donde Víctor Wembanyama, el gigante de 2.21 m regresó a su natal Francia como jugador de los San Antonio Spurs.
En su Francia, en el primer partido contra los Indiana Pacers, Wembanyama brilló con 30 puntos, 11 rebotes, seis asistencias y cinco bloqueos, liderando a su equipo a una victoria contundente de 140-110.
La ovación del público parisino reflejó el orgullo y la admiración por el talento del joven de solo 21 años. La aclamación del público parisino fue un rugido colectivo, un latido sincronizado que envolvió a Wembanyama como si Francia entera abrazara, con orgullo y reverencia, el nacimiento de una leyenda
En el ámbito de los récords individuales, Nikola Jokić y Russell Westbrook, compañeros en los Denver Nuggets, hicieron historia al convertirse en la primera pareja de jugadores en registrar un triple-doble en el mismo partido en dos ocasiones durante una temporada. Su más reciente hazaña se produjo en la victoria 124-105 sobre los Brooklyn Nets, donde Jokić aportó 35 puntos, 15 asistencias y 12 rebotes, mientras que Westbrook sumó 25 puntos, 11 rebotes y 10 asistencias. Esta sincronía en la cancha subraya la química y el alto nivel de juego que ambos aportan al equipo.
En cuanto a movimientos de jugadores, el traspaso de Luka Dončić de los Dallas Mavericks a Los Angeles Lakers sorprendió a la liga. Todos esperaban que Luka fuera un jugador de toda una carrera en Dallas, así que este traspaso indica que la NBA está cambiando de maneras sorprendentes.
El jueves 09 de abril, en su primer regreso a Dallas – Texas con su nuevo equipo, los Mavericks homenajearon a Dončić colocando camisetas con el mensaje «Hvala za vse» («Gracias por todo» en esloveno) en cada asiento del American Airlines Center, reconociendo su impacto y legado en la franquicia.
El traspaso de Dončić movió fibras en el alma del baloncesto; y al cubrir cada asiento con un ‘Hvala za vse’, Dallas no despidió a un jugador, sino que hizo uso del lenguaje visual para expresar de manera universal la gratitud hacia un deportista amado. Y se vio a Luka conmovido hasta las lágrimas.
La NBA, en su dinámica constante de reinvención, demuestra una vez más por qué es mucho más que una liga deportiva: es un espectáculo global donde el talento, la emoción y la narrativa se manejan paralelas a las expectativas del público.
Movimientos como el traspaso de Luka Dončić no solo reconfiguran el mapa competitivo, sino que enaltecen el valor simbólico del deporte, convirtiendo la despedida en homenaje y la rivalidad en respeto.
Lo que está ocurriendo en 2025 no es casualidad: es el reflejo de una organización que entiende que, para seguir cautivando al mundo, debe emocionar tanto como competir.